AMENAZAS

ABIÓTICAS

Pesca de arrastre

Las redes capturan todo lo que encuentran a su paso y dañan las praderas, en cifras pueden llegar a arrancar hasta 1000 kg de hojas (peso seco) por hora. También provoca turbidez, anoxia (déficit de oxígeno) y exceso de nutrientes. Es ilegal en profundidades inferiores a 50 metros.

Fondeo de embarcaciones

Con estructuras permanentes (como muertos) o con anclas y cadenas, arrancan la posidonia de su sustrato y desprenden pinturas y antioxidantes que resultan tóxicos.

Construcción

Puertos deportivos y pesqueros, rompeolas, playas artificiales y otras edificaciones en la línea de la costa. Destruyen las praderas, modifican el hidrodinamismo, pudiendo intensificar los flujos de agua, y los sedimentos provocan el entierro de la planta y turbidez, que obstaculiza la llegada de luz, impidiendo que la posidonia realice la fotosíntesis y muera.

Pesca de marisco

Se labran grandes extensiones para eliminar la vegetación y permitir el crecimiento de moluscos.

Dragado

La extracción de sedimentos causa, directamente, la pérdida completa de las praderas y, indirectamente, movilización de restos, turbidez y exceso de nutrientes.

Residuos

Plásticos y productos tóxicos de uso común, como la crema solar.

Contaminación por vertidos

Los compuestos de los cuales se acumulan en los tejidos de la posidonia y resultan tóxicos, producen turbidez que obstruye el paso de la luz y entierran progresivamente la planta.

De los barcos, como combustibles y aceites.

Domésticos.

Industriales, como carbón, petroquímicos, detergentes, fertilizantes, herbicidas, plaguicidas, papel, metales pesados, sal, etc.

 

Las plantas desaladoras vierten productos nocivos y salmuera, aumentando la concentración de sal en las zonas con presencia de posidonia, superando su umbral de tolerancia.

En verano aumenta la población debido a un turismo masivo, por lo que las depuradoras se saturan por encima de sus capacidades y sueltan el agua sin estar suficientemente depurada.

Eutrofización

Se trata de un exceso de materia orgánica y nutrientes (esencialmente nitrógeno y fósforo) procedentes de aguas residuales, lluvias, ríos, acuicultura, contaminación atmosférica y fertilizantes agrícolas.

Este exceso provoca la proliferación de fitoplancton y algas que reducen el nivel de luz que puede llegar a la planta, limitando la fotosíntesis y el crecimiento.

Se incrementa la actividad microbiana, que causa la anoxificación (disminución del oxígeno disponible) del sedimento.

 

Aumenta la cantidad de herbívoros que se alimentan de hojas de posidonia, como pueden ser el erizo de mar o la salpa, disminuyendo la superficie fotosintética.

Las partículas orgánicas e inorgánicas aumentan la turbidez, impidiendo el paso de la luz.

Las grandes concentraciones de compuestos reducidos del nitrógeno (amonio) y el azufre (ácido sulfhídrico) son tóxicos para las plantas e inhiben la fotosíntesis.

La posidonia almacena el excedente de nitrógeno, reduciendo las reservas de carbono que serán necesarias en épocas de menor luminosidad.

Cambio climático

El calentamiento global y las olas de calor aumentan la temperatura del aire y del mar, que hace disminuir la cantidad de oxígeno disponible, merma el crecimiento de las hojas y los rizomas y cuando supera los 28ºC dispara la mortalidad de la posidonia.

El aumento del nivel del mar provoca un desplazamiento de las praderas hacia la línea de la costa.

Se incrementa la cantidad e intensidad de los temporales.

Puede aumentar la salinidad y la turbidez de las aguas.

Se trata de un efecto en cadena, ya que la posidonia es clave para secuestrar dióxido de carbono y el cambio climático reduce su extensión haciendo que haya menos posidonia para secuestrar CO₂ y el cambio climático se acentúe aún más.

BIÓTICAS

Especies exóticas invasoras

Como otras plantas marinas que compiten por los recursos y pueden modificar las características del hábitat. Esto provoca la destrucción o el desplazamiento de las praderas.

Algas invasoras

Se desarrollan bien cuando aumentan las temperaturas. Compiten por los recursos y se disponen encima de la posidonia, impidiendo que le llegue la luz y que realice la fotosíntesis, provocando su muerte, además de producir sustancias nocivas que matan los seres vivos que habitan la posidonia.

CONCLUSIONES

Por todo esto en pocos años la posidonia ha visto reducida su extensión:

En España un 29%

En Formentera de un 30% a un 40%

En Francia un 9%

En Italia un 25%

En Albania un 16%

En Túnez un 2%